Elvis

Era el año 1956 y acababa de fallecer James Dean, un mito para la juventud por el inconformismo que transmitía. 

Es entonces cuando comienza a sonar el nombre de Elvis Presley, un cantante muy joven que sólo con su presencia y movimientos sobre el escenario provocaba una gran histeria colectiva: fascinaba a los jóvenes y escandalizaba a los mayores. No hubo tiempo ni siquiera para entrar en discusión, fue toda una “explosión”: había nacido  “El Rey” del rock.

Tenía carisma, presencia en el escenario y una voz (sin haber recibido clases de canto) inconfundible que manejaba de manera perfecta según cantase de forma cálida, suave o potente. Era un artista con talento y tremendamente completo: igual interpretaba “rock and roll” que música con raíces “góspel”, baladas “country” o música de tradición latina…y todo lo hacía bien. Su público le adoraba y le sigue adorando. 

Por siempre Elvis.